Swap:
Contrato financiero en el que dos partes acuerdan intercambiar flujos de efectivo basados en distintos activos subyacentes. Los swaps se utilizan para gestionar el riesgo de tasas de interés o divisas.
Ejemplo:
Un swap de tasas de interés puede permitir a una empresa cambiar su tasa variable por una tasa fija para estabilizar sus pagos.